Firman convenio de colaboración con proyecto “Flora: la botica de la abuela”

“La medicina verde no es una necesidad de la pobreza, sino una opción de la riqueza …y llegó para quedarse…” Con esta premisa se firmó este 9 de diciembre un Convenio Marco de Colaboración entre la Universidad de Las Tunas, representada por la Rectora M. Sc. Aurora Ramos de Las Heras, y el Proyecto de Desarrollo Local de la provincia de La Habana “Flora: la botica de la abuela”.

El Dr.C. Rodolfo Arencibia Figueroa, titular del proyecto y presidente del Grupo Técnico de Plantas Medicinales de la Asociación Cubana de Técnicos Agrícolas y Forestales (ACTAF), explicó que “La botica de la abuela” surge con el propósito de utilizar los excedentes que el Ministerio de Salud Pública no le compra a las bases productivas del Ministerio de la Agricultura (Minagri), dedicadas al cultivo de plantas medicinales, y que exhiben propiedades curativas para numerosos padecimientos y enfermedades.

Como parte de la conferencia que tuvo lugar en el aula de Posgrado del campus Pepito Tey, Arecibia Figueroa junto a la Directora Comercial de “La botica de la abuela”, Ileana Santana Gómez, explicaron a los presentes la estructura organizativa y el funcionamiento del proyecto que cuenta con tres líneas de producción y se destaca en la fabricación y venta de bolsas de té, condimentos e infusiones, con buena aceptación por parte de sus consumidores.

Durante su intercambio con la Rectora, el presidente del ACTAF dijo: “Inicialmente firmamos convenios de colaboración con todas las universidades desde Camagüey hasta Pinar del Río, pero a solicitud del Ministro de Educación Superior (MES) decidimos incorporar al resto de las instituciones de altos estudios de las provincias orientales. Nos acompaña en esta experiencia el profesor italiano Maurizio Gioli, de la Universidad de Pisa, un conocedor de la agricultura sostenible y todo lo relacionado con el beneficio agrícola en condiciones bionaturales, que ha aportado muchas enseñanzas para nuestro proyecto”.

Arencibia Figueroa exhortó a la universidad, no a integrarse a su proyecto, sino más bien a pensar en un proyecto propio, con autonomía, que pueda tributarles información y apoyarse en “Flora: la botica de la abuela”. Asimismo la directora de Relaciones Internacionales en la Universidad de Las Tunas, Dr. C. María Gertrudis Batista Ortiz, aprovechó el espacio para manifestar al profesor italiano Maurizio Gioli el interés de la institución en firmar un convenio de colaboración con la Universidad de Pisa.

Universidad de Las Tunas