Revolucionarios de todo tiempo:

Durante esta jornada, la sección sindical de la Dirección General 3, se concentró en el análisis de los discursos recientes del presidente cubano Miguel Díaz-Canel y del primer ministro Manuel Marrero, donde se abordan los problemas que el gobierno reconoce e identifica, entre los que se mencionaron: la mentalidad importadora, la insuficiente producción de alimentos, la falta de garantía en los métodos de regulación de los precios minoristas y mayoristas, la retención de dinero en efectivo -que produce desbalance en el mercado de divisas-, la planificación de gastos que no se pueden cubrir con los ingresos que se generan, la ausencia de contratos legales a trabajadores por formas no estatales -por lo que no se garantiza la defensa de sus derechos-, la existencia de empresas que cumplen sus planes productivos a través de reventas, entre otros.

Además, se explicaron las medidas establecidas para corregir estos errores y tendencias negativas:  incentivar la producción nacional incluyendo la producción de azúcar, actualizar los precios de los combustibles, no dolarizar la economía, incentivar la inversión extranjera, subsidiar a las personas y no los productos, luchar contra los precios especulativos y abusivos, el enfrentamiento a las ilegalidades e indisciplinas, por solo citar algunas.

Después de las valoraciones hechas por los trabajadores, se concluyó, parafraseando al líder histórico de la Revolución cubana, con la idea de que ser revolucionario en los tiempos fáciles, no significa virtud alguna, sino que el verdadero mérito está en ser revolucionario aún en los tiempos difíciles.