Centros municipales recuperan espíritu universitario
Puerto Padre, Las Tunas.- Fuera del calendario habitual, como ha sucedido en los más de dos años que duran las afectaciones por la Covid-19, la Enseñanza Superior retomó en esta ciudad sus quehaceres, con la vuelta a las aulas hace unos días para dar comienzo al curso del 2022.
El Centro Universitario Municipal (CUM) de Puerto Padre responde ante el llamado a la superación desde los territorios, con la modalidad de clases por encuentro.
El doctor en Ciencias Roberto Manuel Romero Bécares, secretario docente de la institución, considera que el recién iniciado período lectivo será “una etapa educativa con sus particularidades, pues va a ser un poco corto, con solo 35 semanas de docencia; aunque eso no significa que la calidad se vaya a entorpecer. El primer semestre se extenderá hasta julio, de ahí entraríamos en la etapa de vacaciones, como le corresponde a todos; y en septiembre reiniciaríamos las actividades, con la terminación del curso prevista entre diciembre y enero del 2023”.
La pandemia de la Covid-19 limitó el contacto directo entre profesores y educandos, pero el accionar educativo no se detuvo y amplió horizontes para llegar a todos. Con el retorno al programa presencial, sin descuidar las medidas sanitarias, la matrícula del territorio dio la bienvenida a 400 nuevos ingresos, mientras el total de estudiantes ascendió hasta los mil 200.
Asimismo, las “buenas nuevas” llegaron por medio de la posibilidad de impartir contenidos dirigidos a miembros del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social, de acuerdo con objetivos impuestos de cara a un futuro cercano.
“Este año vamos a estar atendiendo un programa de Educación Superior de ciclo corto, que será un curso cautivo que, por interés del país, busca formar un grupo de jóvenes especialistas en el trabajo social para el apoyo a las comunidades vulnerables, con un registro de 20 estudiantes”, informó Romero Bécares.
Ante las carencias y obstáculos que surgen en el camino, el claustro docente busca soluciones que pasen por las facilidades tecnológicas disponibles, en aras de la eficacia del proceso docente educativo.
“Desde el punto de vista bibliográfico, tenemos las condiciones creadas. Sin embargo, la situación financiera del país, emparejada a las limitaciones impuestas por la Covid-19, han propiciado que los materiales deban ser gestionados por los estudiantes”, afirmó.
Apenas se dan los primeros pasos en el actual ciclo académico y, desde ya, se fundan los cimientos para fases venideras.
“La situación ha sido atípica y, por tanto, este año haremos dos procesos de ingreso. En septiembre empezaremos con las inscripciones para el 2023, es decir, todos los interesados en matricular en una carrera universitaria en la modalidad de curso por encuentro se deben acercar para realizar la solicitud a la Educación Superior”, concluyó el catedrático.
El espíritu universitario vuelve a reinar en los alrededores de la sede de altos estudios. Allí, cada fin de semana, el sello inconfundible de la juventud le pone un sabor nuevo al conocimiento.
